¿Qué pasa con la fertilidad durante la lactancia?
Esta es una de las preguntas más habituales en el postparto. Muchas mamás que tienen lactancias prolongadas sin reglas nos preguntan que si se pueden quedar embarazadas, así que nos hemos animado a escribir este artículo para daros un poco de información al respecto. Sabemos que hay muchas dudas y que, parece, que hay un halo de tabú alrededor del postparto, pero son dudas naturales y muy lógicas.
Durante el embarazo, la mujer deja de ovular por completo. Esto se debe a la enorme elevación de los niveles de dos hormonas: los estrógenos y la progesterona. Al producirse el parto, este efecto inhibidor sobre los ovarios cesa, con lo que comenzarían de nuevo los ciclos menstruales. A este periodo de vuelta a la “normalidad” se le conoce como puerperio y dura en torno a unas 6 semanas. Casi todas las mujeres que no dan pecho suelen iniciar el ciclo menstrual a los 4 meses del parto. Incluso pueden llegar a ovular a partir de la tercera semana después del parto, por lo que de no desear exponerse a un nuevo embarazo, requerirían emplear anticoncepción a partir de la segunda/tercera semana de puerperio.
¿En qué se ve afectada la fertilidad durante la lactancia?
La lactancia materna es un método de anticoncepción “natural” que protege a la mujer de un nuevo embarazo mientras se recupera del anterior. En estas mujeres la menstruación se inicia mucho más tarde, se puede incluso retrasar un año. Ello es debido a que la succión continua del bebé sobre el pezón bloquea la actividad hormonal sobre el hipotálamo y éste inhibe la actividad hormonal ovárica.
En definitiva, a mayor frecuencia de amamantamiento, mayor eficacia anticonceptiva. Estudios han comprobado que la duración de la amenorrea (ausencia de regla) y la falta de ovulación es más prolongada mientras mayor sea el periodo de lactancia, la frecuencia de las tomas, el tiempo en cada toma y menor la cantidad de alimentación complementaria que reciba el bebé. En las madres con lactancia materna exclusiva no suele producirse la primera ovulación hasta las 27-38 semanas postparto. Incluso las primeras menstruaciones tras el parto pueden ser ciclos anovulatorios. Algunas mujeres que lactan no ovulan de manera regular por lo que las probabilidades de embarazo es menor.
A este método anticonceptivo basado en la lactancia se llama método MELA y tiene una efectividad del 98% siempre que el bebé esté alimentado de manera exclusiva con leche materna a demanda y que no pasen pausas superiores a 6 horas entre toma y toma tanto de día como de noche.
La decisión sobre qué método anticonceptivo deberá emplear en una madre lactante debe siempre adaptarse al estilo de vida y circunstancias personales, así como consultarse con el ginecólogo para que asesore acerca del más adecuado.