Todo lo que necesitas saber sobre el embarazo múltiple
Las futuras mamis de gemelos y mellizos saben que se trata de un tipo de embarazo que requiere una atención especial. El embarazo múltiple supone, a la par que mucha alegría para las futuras madres, mucha angustia para muchas ya que, por lo general, son poco comentados y bastante desconocidos. A pesar de ello, en la época en la que vivimos, es muy poco probable que un embarazo múltiple se considere de riego. Más o menos, se tienen las mismas posibilidades que con un embarazo normal ya que la tecnología actual nos permite hacer diagnósticos y velar por la salud de ambos bebés y, por supuesto, de la madre.
Si estás pensando quedarte embarazada y creer que te puedes quedar de gemelos -o mellizos-, es mejor que leas este artículo para ver las dudas más frecuente y, sobre todo, las diferencias más básicas entre estos embarazos.
El embarazo con mellizos
Comparados con los embarazos de un solo bebé, estos son pocos, aproximadamente uno de cada mil son gemelos o mellizos. La mayoría de los embarazos múliples, suelen ser de mellizos, que es cuando se producen dos fecundaciones al mismo tiempo en dos óvulos con dos espermatozoides y por eso son dos hermanos diferentes pero nacidos al mismo tiempo. En algunos casos el nacimiento de mellizos es muy habitual en la misma familia, debido a que existen antecedentes genéticos sobre todo por la parte materna. Esto implica que, aunque se haya formado al mismo tiempo, no implica una exactitud genética pues los bebés no se han formado en la misma bolsa embrionaria. Sí, hay dos placentas diferentes. También se ha comprobado que los mellizos pueden proceder de un óvulo que se divide justo antes de la fecundación, de forma que cada mitad es después fecundada por un espermatozoide diferente. En este caso, los mellizos cuentan con un factor hereditario idéntico de la madre y diferente por parte del padre.
El embarazo con gemelos
Por otro lado los gemelos, son hermanos prácticamente iguales con apenas algunas diferencias física que a veces son tan invisibles que podemos llegar a confundirlos y suelen tener el mismo sexo.
Los gemelos provienen de un solo óvulo que se divide en poco mas de una semana en dos o más embriones. Cuando el óvulo se divide poco después de la fecundación, cada gemelo tiene su propia placenta y su propia bolsa pero, si esta división tarda unos días más, los gemelos comparten placenta. Esto a veces provoca el Síndrome de transfusión feto-fetal, más como un gemelo ‘quita’ el alimento al otro. Por eso es muy importante controlar este tipo de embarazos al menos cada dos semanas mediante ecografías y con un buen profesional. También aunque, menos frecuente, se da el caso de que los gemelos compartan además de la placenta también la bolsa o cavidad fetal.
También existen los embarazos múltiples de más de dos bebés de los que hablaremos en otro artículo.
Todos estos embarazos una vez diagnosticados como gemelar o múltiple se consideran ‘Embarazos de Riego’. Para que no os asustéis no implican necesariamente peligro para su desarrollo pero sí que debe haber una vigilancia y control materno-fetal más estrecho y continuado para evitar posibles riesgos desde el comienzo de la gestación tal y como recomienda nuestro Especialista en Diagnóstico Prenatal el Dr. Vicente Patiño.