Semana 30 y 31
El momento del alumbramiento ya está al caer, por eso, tu bebé empieza a almacenar cada vez más hierro, calcio y fósforo para poder endurecer sus huesos lo más pronto posible. La producción de grasa hace que las arrugas desaparezcan y tenga más pinta de bebé que hace algunas semanas. Las funciones de los órganos empiezan a ser asumidas, por eso, el digestivo, el hígado, el estómago y el intestino empiezan a funcionar. Tu bebé empieza a distinguir los sabores, lo cal hace que empiece a tener nuevas experiencias, ¡y divertidas! La semana 30 del embarazo se caracteriza sobre todo porque el sistema nervioso de tu pequeño ya está casi maduro. No te asustes si en tu ecografía 5D aprecias que su cabeza es más pequeña que el abdomen, ¡es normal! Todavía es pronto para que la cabeza crezca. El ritmo cardíaco tu bebé es muy rápido pero no es señal de alarma mientras se mantenga en 120 y 160 latidos por minuto.
La semana 31 ya empieza a ser un poco más intensa. Tu bebé puede empezar a escuchar casi a la perfección, aunque está claro que los ruidos externos los oye a baja frecuencia. Su riñón ya es capaz de eliminar la orina -¡casi medio litro al día!-. a partir de esta semana, en tus próximas ECO 5D, lo más seguro es que tu bebé ya se haya colocado en posición para salir. La grasa sigue aumentando, por lo que su piel es mucho más rosada. El vérnix caseoso, que es la sustancia protectora con la que nacen los bebés, aumenta y esto hace que cada vez esté más preparado para el día del parto.