¿Debe usarse el salvaslip durante el embarazo?
Uno de los cambios más notables durante el embarazo -además de las náuseas, el aumento de pecho y etc.- es el aumento del flujo vaginal. Esto se debe, principalmente al desajuste hormonal que tienen las mujeres, sobre todo durante los primeros meses de gestación.
La secreción del flujo no es más que la limpieza de la propia vagina, la cual se conoce más comúnmente como leucorrea. Esta se genera debido al aumento de estrógeno –debido al embarazo- y que el riego vaginal es mucho mayor en la zona.
El flujo y el salvaslip durante el embarazo
Los cambios en el flujo son normales, sobre todo si avanzas en el embarazo. Sin embargo, hay dos síntomas que no son normales: el color amarillento y el mal olor.
Está claro que el flujo, de por sí, no tiene un olor agradable y menos durante el embarazo, cuando el estrógeno sube. Aún así, no es bueno que uses nada para no manchar tu ropa interior. El uso del salvaslip está contraindicado por todos los ginecólogos -a no ser que se esté menstruando-, ¡y mucho más durante el embarazo! El problema del salvaslip durante el embarazo, es que crea una zona que no transpira y en la cual se genera mucha humedad ya que el salvaslip absorbe el sudor y las pequeñas pérdidas de orina que podamos tener. De este modo, se crea el hábitat perfecto para que se desarrollen infecciones como la candidiasis –hongos vaginales- o la cistitis.
Por eso, es mejor no usar el salvaslip durante el embarazo. si os notáis muy mojadas a lo largo del día, lo cual será bastante normal a partir de la mitad del segundo trimestre, lo mejor es que os cambiéis de ropa interior –recordando que siempre tiene que ser ropa de algodón 100%- o uséis compresas tocológicas de algodón puro, las cuales podéis encontrar fácilmente en la farmacia ya que son las que se usan en el postparto.
Recordad que vuestro ginecólogo está ahí par apoyaros en todo el proceso y que es aconsejable acudir a él en cuanto notemos cualquier molestia.