El alarmante aumento de la obesidad infantil
La Organización Mundial de la Salud ha alertado sobre el gran problema que está suponiendo la obesidad infantil. En las dos últimas décadas se ha triplicado el número de niños pequeños y adolescentes con este problema de salud. Además, cada vez el sobrepeso afecta a niños en edades más tempranas.
A nivel de España se ha identificado que uno de cada tres niños pesa más de lo que correspondería su edad. Ello supone que estos pequeños tendrán más riesgo de padecer diabetes o enfermedades cardiovasculares a edades más tempranas de su vida por culpa de la obesidad infantil.
Evita la obesidad infantil
Estas son sólo una serie de estrategias sencillas para evitar la obesidad infantil y ayuda a la salud de nuestros hijos:
- Recuerda que durante los seis primeros meses de vida, la lactancia materna es el alimento ideal. A partir de entonces y hasta los dos años de edad, la lactancia, junto con otros alimentos, constituyen la dieta ideal.
- Introduce progresivamente a partir de los seis meses de vida las verduras, frutas, cereales, carnes magras (pollo, ternera, pavo), pescado blanco (dorada, merluza) legumbres, pastas, huevos, leche de vaca… La clave es que la alimentación sea lo más variada posible.
- Los dos primeros años de vida son fundamentales para asentar las bases de la alimentación de nuestros hijos. Es cuando empiezan a probar distintos sabores, texturas y cantidades. No es nada fácil, requiere paciencia, tiempo y más paciencia por parte de los padres pero es la base de hábitos futuros. Enséñale a comer de todo. Tenemos una maravillosa dieta mediterránea que hemos de descubrirles y una pronta introducción de una dieta variada y equilibrada ayuda a reducir los riesgos de obesidad infantil.
- Opta siempre por alimentos frescos. Los alimentos procesados y que vienen en envases de plástico contienen una sustancia denominada Bisfenol A, que se trata de un disruptor hormonal capaz de producir desequilibrios en el sistema endocrino, incluso a pequeñas dosis.
- La bebida preferencial para los niños siempre debe de ser el agua, evita refrescos con gas en la medida de lo posible ya que su alta concentración en azúcares es uno de los factores que aumenta las probabilidades de obesidad infantil.
- Las golosinas jamás deben consumirse a diario, poseen nulo valor nutricional y son muy calóricas
- El sueño ejerce de alguna manera una función reguladora sobre el peso corporal de los niños. Las hormonas que controlan el crecimiento y el apetito se producen durante las horas de sueño. Procura asegurarles al menos 10 horas de sueño nocturno.
- Aumenta el tiempo que los niños dedican a la actividad física. Es muy importante evitar el sedentarismo, el cual suele acabar derivando en problemas de obesidad infantil.
Sin duda lo más importante es contar con unos buenos hábitos alimenticios en la familia. Acude a un especialista en endocrinología o nutrición para asesorarte sobre pautas saludables para tus hijos tanto si tienen sobrepeso como si no. Es un problema que hay que detectar y comenzar a controlar a tiempo. Una adecuada nutrición infantil es el pilar de la salud de los adultos del futuro y la clave fundamental para evitar la obesidad infantil.